

Colombia fabrica su primer fusil para reemplazar las armas de Israel
Más ligero, económico y "autónomo": Colombia presentó su primer fusil de combate con miras a reemplazar el armamento con el que enfrenta a guerrilleros y narcos tras romper con Israel, uno de sus principales proveedores y aliados militares.
El presidente izquierdista Gustavo Petro puso fin en 2024 a la compra de armas provenientes de Israel en protesta a la ofensiva en la Franja de Gaza ordenada por el primer ministro Benjamin Netanyahu.
En coincidencia con esa medida, la estatal Industria Militar (Indumil) presentó la primera arma de combate fabricada en el país para reemplazar progresivamente los Galil, un fusil de componentes israelíes ensamblado en Colombia desde los años 90.
De acuerdo con cifras recogidas por medios locales, el país producía unas 30.000 armas de este tipo al año. Con el Galil han peleado durante tres décadas los militares contra guerrilleros y narcos que trafican con cocaína y oro ilegal.
La AFP visitó este lunes la fábrica de Indumil, la empresa pública autorizada para elaborar armas y municiones, en Soacha, una población pegada a Bogotá. Allí nacen estas nuevas armas de acero y polímero, 15% más livianas y 25% más económicas que los Galil.
Petro detuvo recientemente la compra de armas a Estados Unidos luego de que el presidente, Donald Trump, retirara a Colombia del listado de aliados en la lucha antidrogas.
El mandatario aseguró que el país debe crear su propio armamento para tener un verdadero ejército de "soberanía nacional".
Sin embargo, expertos han señalado que el país no cuenta con esta capacidad de producción y los costos significarían un fuerte golpe fiscal.
Al lo largo del prolongado conflicto interno, en Colombia han sido empleadas armas de múltiples países. Antes de los Galil, la fuerza pública empleaba fusiles G-3 de fabricación alemana. La extinta guerrilla FARC acudieron al mercado negro para adquirir las AK-47 soviéticas.
G.Herrmann--BVZ