

Suspenden una reunión internacional sobre minería de aguas profundas
La reunión del Consejo de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos (AIFM) que debía terminar el viernes en Kingston, Jamaica, se suspendió debido a un problema médico de un delegado, con lo cual la adopción de las decisiones se pospuso hasta el lunes.
El Consejo, órgano ejecutivo de la organización creada por la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar (Unclos), negocia desde hace más de diez años el "código minero" que debe establecer las reglas de explotación de los fondos marinos en aguas internacionales, que almacenan codiciados minerales como el cobalto, el níquel y el cobre.
Al término de dos nuevas semanas de negociaciones el viernes, los 36 Estados miembros todavía están lejos de finalizar estas normas.
Algunas disposiciones cruciales no logran consenso y varias delegaciones han resistido públicamente los llamados del presidente del Consejo a hacer todo lo posible por concluir el código este año, como estaba previsto en una hoja de ruta adoptada en 2023.
En este contexto, el Consejo aprobó el viernes por la noche una especie de nueva hoja de ruta, pero sin fecha.
Esta propone centrarse durante 2026 en un "enfoque temático" para resolver las cuestiones clave, con cuatro grandes ejes transversales: medio ambiente, finanzas, procedimientos y gobernanza.
Un esperado texto con relación a la empresa canadiense The Metals Company (TMC), que pasó por alto a la AIFM al presentar la primera solicitud de permiso de explotación minera en alta mar a través de su filial en Estados Unidos, no pudo ser sometido a la aprobación del Consejo.
Un delegado se desplomó durante la sesión plenaria y fue evacuado en camilla, lo que llevó a la suspensión excepcional del Consejo hasta el lunes.
Sin mencionar a TMC, la última versión del texto, a la que tuvo acceso AFP, pide en particular a la comisión jurídica y técnica de la AIFM, que emite opiniones cruciales sobre la renovación de los contratos de exploración, "prestar especial atención a los posibles incumplimientos", por parte de las empresas que poseen dichos contratos, de sus obligaciones en virtud del derecho internacional.
Nori (Nauru Ocean Resources Inc.), filial de TMC patrocinada por Nauru, el pequeño estado insular de Oceanía, posee desde 2011 un contrato de exploración de una parcela de la zona de Clarion-Clipperton (CCZ) en el Pacífico, que expira dentro de un año.
Es dentro de esta parcela donde la empresa canadiense planeaba presentar este año ante la AIFM la primera solicitud de contrato de explotación, antes de optar por hacerlo a través de su filial estadounidense.
TMC decidió este cambio de rumbo luego de que el presidente estadounidense Donald Trump ordenara en abril a su gobierno acelerar la entrega de permisos para la extracción minera submarina, incluso fuera de las aguas estadounidenses, aprovechando el hecho de que Estados Unidos no es miembro de la AIFM, ni de Unclos.
L.Braun--BVZ