El Louvre cierra este lunes por una huelga de su personal
El Louvre permanecerá cerrado este lunes debido a una huelga de su personal en protesta por las condiciones de trabajo en el museo, el más visitado del mundo y en pleno ojo del huracán tras el robo de joyas.
En una reunión asamblearia, unos 400 trabajadores votaron por "unanimidad" una huelga "prorrogable" para protestar por el "deterioro" de las condiciones de trabajo y la degradación de la atención al público, indicaron los sindicatos CGT, CFDT y Sud.
Varias decenas de agentes salieron con una pancarta delante de la pirámide del museo en la que se leía: "El Louvre en lucha por unas condiciones de trabajo dignas, el aumento de salarios, más efectivos frente al deterioro del edificio y el proyecto LNR", en referencia a Louvre - Nuevo Renacimiento, un gran proyecto de renovación anunciado a principios de año.
Es necesario "un cambio de marcha [...] sobre las prioridades y las urgencias" del establecimiento, es decir "la seguridad y la rehabilitación del edificio", declaró el delegado del sindicato CGT, Christian Galani.
En su llamado al paro difundido el 8 de diciembre, las organizaciones sindicales ya advirtieron que "visitar el Louvre se ha convertido en una verdadera pista de obstáculos".
La dirección indicó el lunes a AFP que el museo estaría "cerrado todo el día". Según los sindicatos, está prevista una nueva reunión asamblearia el miércoles a las 09H00 (08H00 GMT), teniendo en cuenta que el martes es el día habitual de cierre semanal.
- Decepción -
Este lunes, soleado pero gélido, los visitantes que se encontraban cerca de la pirámide por donde se accede al museo, se mostraron defraudados.
"Estoy muy decepcionado. El Louvre era el motivo principal de nuestra visita a París, porque queríamos ver la Mona Lisa", uno de los cuadros más famosos de la pinacoteca, afirmó Minsoo Kim, un surcoreano de 37 años, de luna de miel con su esposa.
Pietra, una brasileña de 27 años de viaje a París con su familia durante cuatro días, también se dijo "muy decepcionada" por este cierre.
El Louvre, que en 2024 recibió a casi nueve millones de visitantes, está en el ojo del huracán desde el espectacular robo del 19 de octubre, en el que cuatro hombres irrumpieron por una ventana y se llevaron en pocos minutos varias joyas de la Corona por un valor de más de 100 millones de dólares.
El establecimiento también tuvo que cerrar una galería en noviembre debido al deterioro del edificio y sufrió hace unas semanas un escape de agua que dañó cientos de obras de la biblioteca de Antigüedades egipcias.
- Reforma "en profundidad" -
El robo de las joyas, que tuvo lugar un domingo por la mañana después de que los ladrones accedieran al balcón con un montacargas, puso en evidencia los problemas de seguridad del museo.
Aunque en enero, el presidente francés, Emmanuel Macron, presentó con pompa el gran proyecto de renovación del establecimiento, su modernización se ha vuelto más urgente que nunca tras este robo, que acaparó las portadas de los medios internacionales.
Para llevar a cabo estas reformas, la presidenta del Louvre, Laurence des Cars, que en 2021 se convirtió en la primera mujer al frente de este museo, deberá trabajar durante unos meses en tándem con Philippe Jost, encargado de las obras de reconstrucción de la catedral de Notre Dame.
Se tiene que "reorganizar el museo en profundidad", dijo la semana pasada la ministra de Cultura, Rachida Dati. "Es necesario adoptar medidas indispensables, que van mucho más allá de la protección y la seguridad", declaró, sin dar más detalles.
En paralelo, en el Senado prosiguen las audiencias para esclarecer el origen de las fallas en seguridad que permitieron el hurto. El martes, comparecerá por primera vez Jean-Luc Martinez, que dirigió el museo entre 2013 y 2021. Un día después, su sucesora, Laurence des Cars, volverá a hablar delante de los senadores.
P.Baumann--BVZ